“Si no puedes decir algo positivo a una persona, cállate”
“La sinceridad está sobrevalorada”
Sobre estas, ambas, premisas voy a escribir hoy.
A ti, me dirijo a ti… A ti que te crees con derecho a decirme todo lo que se pasa por la cabeza, y que normalmente es malo o desagradable… A ti, ¿Te he preguntado alguna vez en mi vida como me encuentras? ¿Te he pedido alguna vez opinión sobre mi, mi ropa, mis amigas o mi familia? ¿Te he solicitado alguna vez tu inestimable ayuda para que comentes sobre mi estilismo o corte de pelo?
Pues si no te lo he preguntado, ¿por qué me lo manifiestas? ¿por qué me hablas? ¿por qué me dices como me encuentras?, y además, ¿por qué me dices que lo que me encuentras es peor que lo que me encontraste la última vez?, y más además, ¿porqué me lo dices con esa sonrisa cabrona en la boca?
¿Te alegras de verme “peor” según tus ojos? ¿Te gusta verme más gorda o más delgada? ¿Te gusta verme más fea?
No eres la primera que me encuentro así. Y sé que no serás la única ni la última. No me importas, no me molestas, paso de ti, porque eres de esas personas incómodas que te ven y directamente te dicen: “¡¡¡Cómo has engordado, no?!!!” y lo intentan taponar con un “pero estás mejor… tienes la carita más rellenita y te queda mejor, estás como más asentada… De verdad, te han sentado bien esosssss kilosssss…” (dejando caer que son variossss) (J.O.D.E.T.E.!!!)
En primer lugar, ¿qué significa estar “más asentada”? ¿es que antes estaba siempre “adepié”? Y empiezas a notar un calorrrrrrr por la cara… y empiezas a pensar… “Y yo, a esta guarra, ¿qué le contesto?”, porque si encima le sueltas una bordería del tipo: “fíjate, yo te he visto venir de blanco y morado y me has recordado totalmente a la vaca de Milka!!! Oye, … pero que te queda genial eh? Son colores que combinan maravilloso, y además el último berrido en moda … pero no sé! Me has recordado… Qué tontería verdad?” Y entonces te dirán: “Qué mala leche tienes!! Hija, si te ha dicho que estás mejor. Qué susceptible”… JA! JA! JA-MONES!
O al revés, te dicen con cara de disgusto: “Qué barbaridad!!! Te estás quedando en nada!!! ¿Tú comes? ¿No estarás enferma? ¿Te pasa algo?” Ufff. Y notas como se te encienden las orejas… Y piensas “Como te conteste, te dejo aquí mismo tiesa!”
En segundo lugar, ¿quién te ha dado permiso para dirigirte a mi? ¿qué derecho crees que ostentas para manifestarte abiertamente, y normalmente con público alrededor, sobre mi persona o mis seres queridos? ¿se puede saber qué te ha hecho creer que me interesa lo más mínimo tu opinión sobre mi ser? Es una pena que yo no pueda decir lo que pienso sobre ti, y básicamente, no lo puedo decir porque me han educado bajo la premisa de que si vas a decir algo desagradable a una persona, mejor, cállate… Pero en algunas ocasiones, cuando cuestionas mis cosas o las de los míos, me cuesta, me cuesta mucho no ponerme a la altura de Belén Esteban, cogerte del moño y arrastrarte por toda la calle Alcalá!!!
En estas ocasiones es cuando me doy cuenta de que la educación que me han dado en mi casa ha sido excesiva. De que me han hecho vivir demasiado la caridad para con el prójimo, y que me encantaría no me hubieran inculcado esos valores para poder contestarte y destrozarte totalmente… Pero no! No vas a conseguir que pierda los papeles, no vas a obtener de mi ni una mala cara, ni un mal gesto, no voy a perder las formas contigo, porque no te lo mereces… No voy a darte el gusto de obtener de mi una mala palabra… No vas a verme fuera de mis casillas, por dentro me estaré inmolando, pero por fuera sólo verás una sonrisa en mi boca, unos ojos incandescentes y una distancia kilométrica, que es lo al final has conseguido tener de mi… Kilómetros y kilómetros de distancia, porque eres de las personas más envenenadas y dañinas que me he encontrado en mi vida… y además, sin venir a cuento, sin que te aporte nada, sin sacar ningún beneficio… De gratis!!! Lo haces porque sí, porque te apetece, porque “tú lo vales”… Pues ole tú y tu valor… Conmigo no has podido, ni puedes, ni podrás!!!
No me afecta lo que me dices…
Eso si. Me encabrona muy mucho tu forma de ser…
Nada más…
6 comentarios:
¡Ay qué razón tienes! Lo malo es que como dices, si alguna vez saltas, después de haberte callado mil, encima eres tú la borde. La ptra pobre"es que es así...".
Si Sara... La frase por excelencia es "pobre, es que es así!"... Y yo "asá" no te digoooooooo!!!!! Me acabas de dar una idea para un post! Gracias!!!!
¡Qué miedo me das! Ya no se si decirte nada, igual y todo meto la pata, pero nunca con mala intención.
En mi caso, cuando alguien me aborda con este tipo de comentarios, nada enriquecedores, suelo sonreír y hacerme la idiota en grado sumo, me da igual qué piensen los demás de mi, me quiero lo suficiente para estar por encima de comentarios dañinos.
Pero reconozco que en alguna ocasión he sido la tonta que hacía estos comentarios, y repito, sin mala intención.
¿Miedo? ¿Tu? Venga hombre!!! Si eres una bendita!!!!!! En ti no hay mala "milk"... que ya nos vamos conociendo!!! Un besito Beatrice!
Más razón que una Santa... Esta Servidora sin ir más lejos, que tiene unas oscilaciones de peso tremendas y para mi desgracia tengo una conocida “de esas” que da lo mismo si has engordado, adelgazado, te has puesto el pelo de verde, te lo has rapado o llevas unos tamagotchis como pendientes, siempre.. siempre .. siempre tiene la coletilla de “ummmm (con tonito) chica, mírate, la última vez que te vi estabas mucho mejor” aunque la última vez que te vio fuese el año anterior con 10 kilos más o 15 menos, con el pelo con rastas o sin pelo, es igual… siempre el año anterior estaba mejor. La tengo una manía. Y como dices, me muerdo la lengua por educación y porque es amiga de mi madre. Pero mi coletilla de “pues fíjate yo a ti te veo igual, bueno… con más arrugas.. ya sabes.. la edad mujer, es lo que tiene….”
Yo creo que también me callaría si alguna persona me viniera con algún comentario de ese tipo para hacerme daño,pero lo que no puedo es ocultar que lo que me ha dicho me ha sentado mal.Se me nota en la cara,me cambia completamente el rostro.
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