Llegado este punto de nuestras vidas todos
sabemos que “echar” es un verbo distinto de “hacer”… Y que cuando “echas” (sin
h) es que arrojas, tiras, impulsas… y que cuando “hechas” (con h) has terminado
de hacer unas magdalenas y por tanto, declaras oficialmente que están “hechas”
y listas para engullir…
Si es verdad que en ocasiones puede llevar a
error, porque no es lo mismo “estar hecho un hombretón” que “estar echado a
perder”… y ambas frases tratan de las características de una persona en un
momento determinado de su vida… pero fuera de esta salvedad, hay grandes
diferencias entre “echas” y “hechas”.
El verbo “echar” se utiliza para un montón de
cosas… Demasiadas para mi gusto… Creo que si en lugar de “echar” tantas cosas,
buscáramos un verbo similar o análogo, al final nadie “echaría” nada… O
“echaría” solo lo que, de verdad, hay que “echar”…
“Echar una mano, echar de clase, echar sal o
azúcar, echar una bronca, echar unas risas, echar gotas en los ojos, echar agua
a las plantas, echar el cerrojo, echar un vistazo, echar raíces, echar el
pestillo, echar la basura”…
¿¿¿Ves??? Habitualmente se “echan” mogollón
de cosas, y parece que no “echamos” nada de nada.
Procedo a hacer una clasificación de cosas
que he oído que se “echan”, con su correspondiente reflexión, totalmente
subjetiva y absolutamente personal, al efecto:
- Echar
de menos:
Con independencia de que el sentimiento de “echar de menos” es una fatalidad,
porque significa que hay algo o alguien, que tenías y que ya no tienes, que te
gustaría recuperar o que querrías tener y nunca has tenido, es la mejor forma
de “echar” algo… Es la más correcta. También se puede “añorar” pero es repipi y
redicho… “Añorar” es como de telenovela… “¡¡¡Cuantttísisisisimo
le añoro, Lisensiado Valderrama!!!”… “Echar” de menos a una
persona es precioso porque significa que la amas. (Uyyyyyyy que blandengue
estoyyyyyyyyyyyyyyy!!!) Me voy a recomponer ahora mismín!
- Echar
pestes: No
está mal utilizado. Suena bien. Suena fuerte, duro, con poderío… A mi me da
miedo cuando las “pestes” se convierten en “conjuros” o “maldeojo”… Me da
respeto… Y si me han “echado” alguno prefiero no saberlo, no porque crea en
ellos, sino porque seguro que me empiezan a pasar miles de cosas rarísimas que
yo, por imbecilidad manifiesta, lo relacionaré con el embrujo “echado”. Yo
“echo” bastantes pestes al volante. Bueno, en realidad contesto a las pestes
que me “echan”… De “motu proprio” pocas veces soy yo la que empieza una guerra
automovilística… Dice la ESTRELLA de mi vida, que una de las cosas que más
gracia le hacen en mi, es cuando me enfado al volante y le suelto a alguno mi
famoso: “¡¡¡Vete a la ñorda colega!!!”…
¡¡¡Qué horror!!! ¡¡¡Qué mona!!! ¡¡¡Qué fina!!! Y eso que yo que creo que
delante de los enanos me contengo, pero parece ser que no lo suficiente.
- Echar
una carta: Al
lado de lo bonito que es remitir un escrito, enviar un email, emitir un soneto
y hacérselo llegar a su destinatario… “Echar” una carta suena fatal… Del tema
“echar” las cartas (en sentido de brujería), ya me he pronunciado... No me mola
nada de nada… Pero “echar” una carta al correo, queda tosco y rudo. Es como si
te hubieran castigado a bajar al buzón descalzo y sin calcetines con la nieve
llegándote a las rodillas… “Nene, vete a
echar las cartas”. Bien es verdad que gracias a la tecnología y
el email, ya no hace falta tener sobres y sellos a mano… De hecho hace mogollón
que no soy consciente de que existan los buzones. Si ahora mismo me preguntan
donde hay un buzón, no sé ni donde ubicarlo.
- Echar
una siesta: Esto
es glorioso si te dejan, pero cada vez se hace menos. En mi casa nadie se
“echa” una siesta desde hace bastante tiempo, hemos cambiado totalmente el
nombre a tan maravillosa costumbre, de forma que el AVIADOR se pega
“coscorrones”, se “esnuca”, pierde la “consciencia”, pero nunca manifiesta
abiertamente de palabra que se va a “echar” la siesta. Yo oigo la palabra
“siesta” y me acurruco en el sofá… Aunque pocas veces consiga cerrar los ojos y
marcharme, a mediodía, a mis benditos sueños.
- Echar
la pota: A
mi “echar” la pota me gusta muchísimo. Es taaaaaaaaaan preciso y concreto. Te
preguntan: “¿Dónde vas?”, y contestas “A echar la pota”, y nadie te pregunta nada
más. Nadie se cruza en tu camino. Te quedas solo ante el Sr. Roca en un
pis-pas… Es una cosa absolutamente personal e intransferible. Nadie se
cambiaría por ti en ese momento. Nadie la puede “echar” por ti. Es tuya y solo
tuya. Tu pota y tu “echada”. “Echar” la pota es guay!. También puede
denominarse “vomitar”… pero “echar” la pota, la repota, la repotaza, es todavía
más contundente y firme.
- Echar
los Reyes Magos: Horrible!!!
“Hola bonita, ¿qué te han echado los Reyes?”…
Me han “echado” de casa, no te digo!!! Los Reyes Magos de Oriente me traen
maravillosos regalos para mantener la alegría de la niñez. Los Reyes no “echan”
regalos… Los Reyes traen ilusión en los ojos de mis hijos, no les “echan” nada,
les traen unos días de entretenimiento y buenos propósitos para que les sigan “echando”
cosas al año siguiente…
- Echar
de comer: Dicen
que el día de su primera boda, la Duquesa de Alba soltó un maravilloso “que echen de comer a la prensa” que ha
quedado para la posteridad. No sé si será verdad, pero eso he oído y me parece
una frase pistonuda. Aunque en realidad, “echar” de comer se hace con los
animales, no con las personas. Si alguien te “echa” de comer abiertamente,
prepárate a agacharte y buscar el “abrevadero” debajo de la mesa, porque eso
sólo se hace en el suelo. Si te “echan” de comer, comes en el suelo de la
cocina al lado de Misifú seguro!!! Nadie “echa” de comer en una mesa con
mantel, cubiertos y cristalería… Noooo!!! Ahí te “dan” de comer, no te “echan”
la comida.
- Echar
el balón: Si
alguna vez paso por el patio del colegio y oigo al PLANETA de mi vida decir “échame la pelota”, ese día, si me
recupero de la embolia, le corto las piernas para que no vuelva a jugar!!! Es
lo peorrrrrrrrrr!!! O “venga Luis,
echa aquí”… ¿¿¿¿¿¿¿?????? Hay gente que “echa” pelotas y
balones… Os lo prometo!!! Y es horribleeeeeee!!! Los balones se tiran, se
pasan, se juegan… pero no se “echan” colega! Si alguien te pide que le “eches”
la pelota, no te des la vuelta, porque te dará un navajazo fijo!
- Echar
una foto:
Si tu le pides a alguien “¡¡¡Echame una
foto!!!” lo más lógico es que te peguen un camarazo en toda la
jeta que te deje la mandíbula dislocada o a medio-dislocar… Las fotos se
“hacen”… “¡¡¡Hazme una foto por fissss!!!”
No se “echan”… Nunca se “echan” fotos… ¿qué es esoooooo? Este “echado” con el
anterior son de lo peor que se puede “echar”!!! También se pueden “tomar
fotos”… pero esto suena realmente cursi… Yo no lo utilizaría en exceso… Pero…
¡¡¡¡¡¡¡“echarrrr una fotoooooo”!!!!!!! Jamás, jamás, jamás!!! Y se oye mucho
más de lo que pensamos…
Y “hechas” estas reflexiones… ¿Tú que más “echas”?
(Y no te estoy preguntado por eso que “echas”
poco, te gustaría “echar” más y fardas de que “echar” mucho… )
Nooooooo!!! Eso no ehhhhhhhhhhh???
Aparte de eso… ¿Qué otras cosas “echas”?
12 comentarios:
Lo de la Duquesa de Alba merece capítulo aparte.
Echar de comer a la prensa como el que tira unos huesos a los perros.
En que mundo vive...
A mí también me suena fatal eso de que te han echado los reyes, me parece horroroso.
Y como ves yo echo pelotas fuera y no contesto más.
Besos.
Echar una mano. Y con tu permiso, voy a hacer una reflexión también personal e intrasferible.
Me encanta echar una mano. Me sale solo, no me cuesta, y con los años cada vez con más facilidad. Ya bien sea de modo espontáneo o porque alguien me lo pida (Ahí es cuando suele ir acompañada de mi coletilla "Vamos, si hace falta me quedo sin comer", porque Contini no es de coletillas, nooooo).
¿Pero qué ocurre cuando necesito que me echen una mano? Pues que no la pido, y no es por orgullo o soberbia, ¿por timidez? puede ser, pero a veces me siento idiota y pienso: Si me encanta hacer favores, y no porque me lo agradezcan, sino por el hecho en si de ayudar, ¿porqué no lo pido cuando lo necesito? Seguro que tú lo sabes, que me conoces pistonudamente. Un beso, que hace mucho que no te lo doy.
Cuando ya me tienen harta, pero muuuuy harta "echo de clase" a algún alumno.
Pero ahora hay que seguir unas normas. No se puede echar a alguien y olvidarte de que existe. Lo tienes que dejar en el hueco que deja la puerta abierta o, si la cierras, tiene que situarse en las cristaleras para poder controlarlo. Además no lo puedes echar cuando quieras ni todo el tiempo que quieras ya que no le puedes dejar sin explicación.
Una solución es echarlo a otra clase pero yo no les endiño a mis compañeros lo que me toca a mí, si ese elemento me está estropeando la clase no quiero que les afecte a más alumnos.
Aclaro que esto ocurre en casos muy excepcionales.
Beso
He "echado" de menos una de las que más me gustan.... ¿Qué "echan" en la tele hoy?. Es fantástica ! Y muy reveladora de la bazofia que nos suelen endiñar... Te imaginas a los programadores pensando ¿qué reality le "echamos" hoy a "estos"?
Y echar la luz.
No puedo con ello.
Tres veces he puesto este comentario. No se que pasa
Besos
En una ocasión le dije a uno de mis hijos "echame una mano" pidiendo ayuda urgente y el muy cara y listo al mismo tiempo me lanzó un brazo de muñeco.
Nunca más lo vuelvo a decir.
De vez en cuando me dan ganas de "echar a mis hijos de casa", porque no seré yo la que se vaya. Es un decir. Me muero si me toman la palabra. Aunque suelo usar más la mala expresión de "irse, marcharse, no molesten más"
Escribiendo mi próxima entrada tengo otra de echar: en mi caso estoy "echando tripa" a marchas forzadas. No se si es muy correcta la expresión pero la verdad es que la tengo crecidita. Después de dar a luz tendré que echarla de mi vida o más bien recogerla para adentro o no se que haré, pero algo hay que hacer. Una se pone muy gorda.
A mi me repatea: que "echan" en la tele.... puaj, super puaj, como tu dices. Será que ponen, que hay, que ... lo que sea menos que echan en la tele. A mis hijos se lo he "echaó" a prohibir! hombre ya!
Por cierto, soy otra vez el anonimo de "echar en la tele", que digo yo, que para cuando otro post de las expresiones de tu casa....??
Lo releo xq como os conozzzzzco mucho, pues me encanta! Y aunque no os conociera, también es un post de 10.
Llego tarde otra vez.
Lo de echar los Reyes no me gusta nada.
Y lo de échame una foto tampoco.
Hay una cosa que sí que me gusta mucho y es...
Echarme la siesta.
Buen post.
Y hablando de echar comida, ¿me echas agua? Uff, inaguantable. Aunque no tanto como para llegar a la anécdota: conozco un padre al que, su hija de cinco años le pidió muy amablemente si le podía "echar" más agua. Y se la echó, la jarra entera encima de la cabeza. Para que aprendiera lo que era echar. Como siempre, hay gente que no tiene medida.
En lo demás, estoy contigo en casi todo. Lo peor, echar fotos, y qué echan en la tele o en el cine. ¡Me da dentera solo escribirlo!
echar un guiñote...
ej que veo mucho madrileñismo por este blog hale, hale a buscar
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