UNO DE ENERO ... ABSURDUS DAY!!!

Si… El día uno de enero es ese "absurdus day" que para tu desgracia ha llegado y en el que te vas a sentir ridículo y miserable.

El día uno de enero es ese día absurdo en el que te das cuenta de que nada de lo que te has prometido a ti mismo (o incluso has osado a decir en voz alta) meses atrás, vas a cumplir…

Te has pasado desde septiembre diciendo “a partir del uno de enero voy a …” y te has dado cuenta de que eres un bluf, porque el uno de enero ha llegado y no tienes la más mínima intención de hacer aquello que tanto te has pavoneado diciendo que harías, delante de todos.

El día uno de enero, no te vas a apuntar al gim… quizá lo hagas el día dos, pero el uno no… básicamente, porque el gim está cerrado.

El día uno de enero, no vas a empezar a estudiar, ni el carnet de conducir, ni los parciales… básicamente, porque el día uno de enero, o tienes una resaca de narices por el juergón de la noche anterior o estás comiendo con los tuyos tranquilamente alrededor de una mesa llena de polvorones y turrón.

Esta comida te sobra… Vamos que si te sobra!!! Te sobra tanto, que si pudieses no la harías, pero como parece que es la última comida fuerte de la Navidad, porque el día de Reyes es más de merienda en casa de los abuelos que de comilona bestial, te das el último homenaje de estas fechas y por tanto tampoco cumples con el clásico “el uno de enero empiezo el régimen”…

El día uno de enero, no vas a hacer nada de lo que te hayas propuesto, en todo caso lo harás a partir del día dos… pero si dices “el dos de enero dejo de fumar” es menos contundente, seguro y preciso que si la fecha es el día “uno de enero”.

¿Por qué?

No se sabe… pero todo el que quiere empezar con un propósito, lo fecha en el día uno de enero!

Sólo hay algo que el uno de enero haces si te lo has propuesto y es irte a esquiar… Muchísima gente se marcha a esquiar el uno de enero hasta el día cinco. ¡¡¡Qué envidia!!! Yo también lo hice hace años… muchos años…

Los demás propósitos quedan aplazados al día dos de enero, cuando no suspendidos sine die hasta que se te vuelva a ocurrir que te apetece hacer un esfuerzo o sacrificio… y seguramente lo aplazarás un mes más.

El uno de enero es el día de dormitar viendo los saltos de esquí o el concierto de año nuevo desde Viena… Es el día que te levantas a las mil y en el que nadie te regaña porque entienden que te has acostado tarde… y quizá no te has acostado tan tarde como otras noches, pero en la noche de Nochevieja está permitido llegar con los churros a casa y levantarse a las 2 de la tarde…

Sólo tiene una cosa realmente buena el uno de enero y es que en sus primeros segundos, y tras una ingesta de uvas y pepitas, puedes besarte con las personas que quieres, desearles de corazón y con una sonrisa sincera lo mejor para el año que empieza y brindar para que el año próximo sigamos todos los que estamos…

Yo me he hecho dos propósitos para este "uno de enero":

1.- Escribir un post… Nunca lo había hecho, siempre lo hacía el día dos. El día uno me daba perezote.

2.- Acortarlo… No meter esos retruñazos habituales en mi… Ser escuetita y directa. Que el primer post de año sea fácil de leer y digerir.

Pues ya está! Lo he hecho… He cumplido con mis dos propósitos del uno de enero… Me hubiera encantado irme a esquiar, pero… otro año será…

¡¡¡Feliz 2014 para todos!!!

Seguimos juntos otro año más… ¡¡¡Qué suerte!!!