(AVISO: Si no has leído el post anterior, éste carecerá totalmente de sentido para ti)
La bajada fue en silencio… Un silencio bastante incómodo, por lo menos en mi caso… Los niños iban callados porque se mareaban con bastante facilidad por aquellas curvas y buscaban animalitos por los montes para no acabar potando.
Llegué a casa de B a las 21.15… y aparqué en el parking de la playa… La nube empezaba a ser monstruosamente grande y el tema no me estaba haciendo ninguna gracia.
Esto es lo que se veía desde casa de B. que está a 6 o 7 kilómetros de mi casa…
B. llegó con toda su prole…
“¿Qué tal Mara?” “Regu… Mira hacía el monte”… “JODER qué es eso?” “Pues hija un incendio que lleva toda la tarde… Pero es que la nube es enorme!!!” “Bueno olvídalo, D. ha ido ya a por la cena … vamos a la playa”…
Yo estaba que no estaba. No paraba de mirar hacía el monte, hacia la nube, empezaban a volar motitas por la playa… Al caer la noche, dejamos de ver volar los hidroaviones y helicópteros, pero la nube seguía ahí… Y el viento… El viento era bastante fuerte…
“Venga tía ¿qué te pasa?” dice B… “No sé… esto del incendio no me mola nada, es que una señora me ha dicho…” y se lo cuento. Veo que pone cara seria… “Llama otra vez venga… Llama a la policia”
Saco el móvil y marco al 092: “Policia local digame?” “Buenas tardes, mire yo estoy en Marbella, en la playa, y tengo mi casa en la zona de La Mairena. Estoy viendo el incendio y no sé si debo subir o no…”. “Pueh mire, el incendio es en Coin… Pero no le puedo informar del recorrido que está cogiendo. Llame mejor a los bomberos al 080” “Perfecto gracias”
Marco el 080: “Bomberos digame?” “Buenas tardes, mire yo estoy en Marbella, en la playa, y tengo mi casa en la zona de La Mairena. Estoy viendo el incendio y no sé si debo subir o no…” “Ufff Lejizimo señora!!! Ezo eztá lejoh lejoh lejos del incendio. Usté no ze preocupe. La Mairena está lejízimo de Coin” “Muy bien, perfecto gracias”
“¿Te has quedado ya tranquila?” “No!”
Y seguimos con la cena… Los niños jugaban, pero la ESTRELLA, que ya me conoce, se acercaba de vez en cuando… “Mami, ¿estás preocupada por el incendio?” “No mi vida, estoy bien. Los bomberos dicen que está lejísimos…”
Llegaron las hamburguesas, cenamos, nos reímos, hicimos fotos… Llamó el AVIADOR un par de veces para ver como íbamos y sobretodo para oírme y ver mi tranquilidad o intranquilidad…
Desde la playa se empezó a ver a lo lejos una sombra de luz roja en el cielo… Como un foco enorme rojizo…
Yo cada vez estaba más callada. Raro, rarísimo en mi.
Llegan las 23.10 de la noche… Levantamos el campamento y vamos dando un paseo hasta el parking donde está el coche.
Me despido de D. “Bueno tía, cualquier mínimo problema ya sabes donde estamos…” “Gracias”
Me giro hacia B. “Estás fatal… No te vas bien verdad?” “No. No me hace ninguna gracias, para que te voy a engañar.” “Pues llama otra vez, llama a los Bomberos”
Marco el 080: “Bomberos digame?” “Buenas noches, mire yo estoy en Marbella, en la playa, y tengo mi casa en la zona de La Mairena. Estoy viendo el incendio y no sé si debo subir o no… Voy con dos niños pequeños” “Ufff Lejizimo señora!!! Ezo eztá lejoh lejoh lejos del incendio. Usté no ze preocupe. La Mairena está lejízimo de Coin. Ademáh hay doh reteneh ya ubicadoh en La Mairena. Uzted zuba sin problemas. Haga caso a los efectivos que vaya encontrando por el camino, zi ez que loh encuentra, y en cualquier cazo, ezteze atenta toda la noche…”
¡¡¡ATENTAAAA!!! ¡¡¡YOOOOOO!!! ¡¡¡A UN INCENDIO!!!
¿¿¡COMO COÑO SE ESTÁ ATENTO A UN INCENDIO!??
Yo puedo estar atenta a un ladrón que va a entrar por una puerta… Me quedo toda la noche mirando la puerta y si veo que se abre, le pego un sartenazo al pavo. Pero… ¿¿¿¿a un incendio???? ¿Cuál es el momento de evacuar? ¿En qué momento decides que te piras? Con los dos niños además… y sola…
“Oiga, me imagino que estarán ustedes liadísimos, pero me puede explicar como estoy atenta al incendio?” “Uzté haga caso a los miembroh de la Policía, Bomberos y Protección Civil de la zona, elloh le informarán de todo zeñora… Ez que eztá siendo muy grande y no le puedo informar de na más” “Muy bien. Muchas gracias. Muy amable”
“¿Qué te ha dicho?”
Veo a todos los niños mirándome. Los cuatro niños de B. A mis niños, con sus caritas de susto … y a Mariana…
“Nada, nada, que está muy lejos”… Le hago un gesto a B para que nos retiremos un poco. “Tía… Me ha dicho que esté atenta toda la noche. Que es muy grande y que haga caso a las fuerzas vivas de la zona. Que ya hay dos retenes en La Mairena preparados”… “Joe… qué mal rollo… Quieres quedarte en casa? Quédate!!!” “No tía… Cómo nos vamos a quedar los cuatro en tu casa?” … “Ya, pero como te vas a subir así… Y si pasa algo? Mira déjame a los niños. Te subes, si ves que aquello está limpio, te bajas a por ellos. Si ves que aquello está feo, te bajas con Mariana a dormir a mi casa. Si ves que los retenes no te dejan pasar, te vuelves y nos acoplamos como podamos”. “Pues tía, lo prefiero… No me apetece nada subirme a los niños allí arriba”.
Me giro… “Venga chicos, os quedáis a dormir con B” “¿y tú mami?” “Subo, miro como está y si está feo, me doy media vuelta” “Yo también subo!!!” dice Mariana… (Eso es fidelidad colega!!!) Y en ese momento veo que saca de su bolso los pijamas de los niños y los cepillos de dientes (Eso es previsión colega!!!) “Mis niños no suben más a ese monte!!!”. Flipé con Mariana…
Mis niños empezaron a lloriquear “Mami, te quiero”, “Mami no subas al fuego”, “Adios mamá, dime que me quieres” Se me puso un nudo horrible y absurdo en la garganta. Y B tuvo que tomar las riendas… “Vamos chicos, no pasa nada. Mamá va a subir, si no hay problema baja a por vosotros y os subís todos y si lo ve feo, baja inmediatamente. Además hay policía y bomberos por todas partes…” Los niños empiezan a alejarse y B se gira hacía mi “Ni media tontería Mara. A la mínima te bajas. Por favor, no me hagas esto!!!” “Si bonita, gracias. De verdad, si lo veo feo me doy media vuelta. Gracias B. siempre estás conmigo en mis momentazos…” “Venga súbete ya!!!”…
Me monté en el coche, mientras veía a mis niños marcharse… Eran las 23.30. Mariana me miraba de reojo y estaba calladísima… Empezamos el ascenso…
En mi escalada por aquella carretera me crucé sólo con un coche, por lo que entendí que el pánico no estaba cundiendo. Por supuesto no me encontré con ninguna fuerza viva (ni muerta) que me fuera a frenar, proteger o asesorar y a mitad de trayecto me llama el AVIADOR: “Mara me acaba de llamar el Administrador de la Comunidad de Propietarios de la casa, que está todo el mundo marchándose porque el incendio es enorme y dice que si tenéis algún sitio donde dormir, que evitéis dormir en la casa. Es que después de lo del año pasado la gente está cagada de miedo…” “No te preocupes estoy subiendo a ver como está el tema y si lo veo mal, me bajo” “¿Y los niños?” “Se han quedado con B” “Bueno, ten cuidado por favor” “Vale. Un beso”
Mariana me volvió a mirar raruno.
Me dí cuenta de la inmensidad del incendio, porque veía la montaña con una sombra roja detrás… Y la veía entera, enterita… El perfil entero de la montaña, de principio a fin, estaba perfectamente dibujado por la luz color rojo que desprendía el fuego…
Llegamos a la casa. Entramos en el garaje. Y en ese momento no fui consciente de que ya no había ningún coche. Aparcamos y subimos en el ascensor. Mariana entró en la casa para ir al cuarto de baño y yo salí otra vez a la piscina…
Reinaba un silencio sepulcral. No se oía nada. Sólo el viento. El cielo estaba entre amarillo, naranja y rojo… El olor… No sabría definirlo… El olor a fuego, a árboles quemados, a barbacoa, a humo… Me empezó a picar la garganta… La luna estaba absolutamente roja.
Y cuando llego a la zona de la piscina donde grabé el video horas antes…
Diossssssssss Mioooooooooo!!!
Veía perfectamente las llamas!!! Estaban ahí, cerca… Le debía quedar menos de medio kilómetro para llegar a la Urbanización… Diossssssssss Míooooooooooooo!!!!!!
Entré corriendo en la casa: “Mariana, maletas que nos vamos!!!” “Qué?” “Qué nos vamos!!! El fuego está muy cerca. Yo no me quedo aquí ni muerta!!!! Maletas ya!!!”
¡¡¡Y empezamos a hacer las maletas a toda velocidad!!!
6 comentarios:
Estamos en manos de inútiles.
Pero hasta el más inútil del mundo no puede dar información equivocada tratándose de un incendio.
En caso de duda se desaloja.
Y no hablo por hablar.
Yo he vivido algo parecido hace tiempo y tuve que decidir desalojar o no unas colonias infantiles. La información que me llegaba era confusa, dudosa y sesgada.
Desalojadas y punto.
Puedo asegurarte que en los mejores centros de coordinación y control para este tipo de situaciones reina el caos y los procedimientos y protocolos de urgencia son ignorados por mil motivos, desde nervios hasta presión de los políticos, etc.
No se pueda dar una información como la que te dieron.
En caso de la más mínima posibilidad de que el viento cambie, o de otras circunstancias hay que desalojar.
Por sentido común y sobre todo porque no estamos preparados para este tipo de situaciones.
Al menos en este país.
Besos.
Si Toro... de eso ya me he dado cuenta, pero hay que vivirlo para darte cuenta...
Besos
Estoy alucinando! Me es imposible ponerme en tu piel e imaginarme mi reacción ante algo así.
Qué bien que B se quedó con los niños y qué grande Mariana.
Yo quiero una Mariana!
Besos
Mi opinión es como la de Toro Salvaje.
Ante un incendio a los responsables de seguridad no les debe temblar el pulso.
Hay que desalojar a las personas de un amplio radio de riesgo.Si no pasa nada y afortunadamente no llega el fuego a los desalojados,pides disculpas y ya está.Es una faena que te echen de tu casa para nada.Pero....Como pides disculpas si no desalojas y el fuego llega a un sitio habitado?
Ni comento... por favor, termina con esta angustia...
Jo! Que momento...
yo tambien vivi un incendio de cerca una vez, y fue terrible, me quede alucinada del ruido de las hojas y los árboles quemandose, y las voces de los bomberos entre ellos....fue impactante.
Menos mal que tenias a B.
Viva Mariana!!!!
con los pijamas en el bolso, ole!!
Mariana vente conmigo!!! te pago maaaaas!!!
Deseando que sigas contando....
Publicar un comentario