VEINTE AÑOS DESPUES...

Cuando aconteció, en Septiembre, lo de mi ex-Birkin, en ese bautizo, la hermana de mi superamiga P. nos anunció/amenazó a P., a B y a mi, que este año era el 20ª aniversario de nuestra salida del colegio y que P. tenía que organizar una cena/reunión, localizando a todas las antiguas con nuestra ayuda…

La primera pregunta fue: “¿Cómo van a haber pasado 20 años? IMPOSIBLE!!!”… Y al echar números y la vista atrás, efectivamente habían pasado 20 veranos, con sus correspondientes, inviernos, otoños y primaveras… Me pareció un espanto la cifra y una dificultad horrible localizar a todas.

En el mes de Enero, P. nos pidió direcciones de correo de todas las antiguas que pudiésemos conseguir echando mano de Facebook y demás redes sociales, y atacó con un power point espectacular lleno de fotos, para borrar y triturar directamente, pero que sacaron las mejores sonrisas y comentarios de todas las destinatarias del correo. (Hago un inciso para decir que “cualquier tiempo pasado fue anterior” y que el presente siempre es mejor, por lo menos en el estilismo)

La última foto era de las becas, donde se veía a 20-25 niñas de 17 años con carita de susto, ojos grandes y sonrisas nerviosas, que iban a ser echadas al mundo y a la vida para defenderse y vivir, después de unos cuantos años de formación pedagógica, humana y cristiana.

La cita se concretaba para el día 2 de marzo a las 20.30 aprox.

La respuesta no se hizo esperar y todo el mundo lleno de ilusión quedó en organizarse para poder ir. Empezaron a salir más niñas/mujeres, que pese a que no habían protagonizado aquella foto de las becas, si que habían pasado también por el colegio y les apetecía muchísimo cenar con sus antiguas compañeras.

La lista llegó a ser de casi 55 alumnas. Sólo 7 se han quedado sin localizar.

Las que no podrían asistir lo anunciaron enseguida. Residencias en Méjico, Alemania, Barcelona y Valencia, entre otros, hacían imposible organizar a la madre y su viaje para dejar desorganizada a toda la familia… Las demás confirmamos todas…

Al final, enfermedades de última hora de hijos/maridos/antiguas-alumnas hizo que faltaran algunas más.

Recogí a B. en su casa y para allá que nos fuimos. Entramos ligeramente nerviosas y creo que no volví a ver a B. ni a P. Fue imposible entre tanta mujer quitándose la palabra de la boca. La cena/picoteo debía estar buena, y digo debía porque creo que ninguna probamos nada para no perder “ripio” contándonos nuestras vidas…

¡¡¡Cuánta ilusión y alegría se veía en cada saludo!!!

Cada una habíamos formado una vida, algunas con familia más o menos grande, otras vivían dedicadas a sus trabajos, otras hacían un mix entre ambas cosas, otras dedicadas a viajar a lugares superchulos por curro. Entre las más originales destacaban: una presentadora de la tele, una amazona con casa rural en Toledo que nos vendió todo tipo de producto marroquies, otra que se iba a vivir a China hoy lunes, día 5 de marzo y consideró que era su última oportunidad de vernos a todas juntas otra vez en mucho tiempo, y una que vino con el bebé de siete días y los puntos de la cesárea sin quitar…

Estábamos todas iguales… Pero todas, todas, todas… 

Y por supuesto, estaba ella, nuestra profesora, nuestra tutora, nuestra educadora, estaba PM, que es una persona que hace totalmente honor a sus iniciales ( … y que cada uno ponga las palabras que quiera en cada inicial)… No sé que me pasa con PM, pero cada vez que la veo y me habla con ese cariño infinito, esa preocupación por mis cosas, y esa ternura, se me enguachinan los ojos y me doy cuenta de todo el bien que ha hecho por mi a lo largo de mi vida. ¡¡¡Me encanta hablar con ella!!!

Por primera vez se hizo por parte del colegio un regalo a una promoción… Se nos regaló un marco con una imagen preciosa de la Virgen del cole, nuestra Vigencita, que, por supuesto, ya preside el salón de casa…

Lo mejor del encuentro: las carcajadas que se oían, el bullicio y emoción de personas que se encuentran después de tantos años y que tienen recuerdos, unas de otras, que ni siquiera las propias protagonistas recuerdan, la ilusión de todas que se palpaba en el ambiente, la alegría memorando travesuras, novios, fiestas y la foto que ya tenemos todas en nuestros correos electrónicos, porque por supuesto, hemos amanecido con un powerpoint de P. en el que sale la foto de las becas de hace 20 años y, acto seguido, la foto del viernes…

Lo peor del encuentro: lo rápido, rapidísimo que se nos pasó a todas … Sin darnos cuenta estábamos apagando luces y marchándonos a otro sitio a tomar una copa, el problema es que ya no fuimos todas…

Gracias al cole por todo lo que me aportó en la vida y en la noche del 2 de marzo, gracias niñas/antiguas alumnas, y siempre amigas, por recordarme tantas perrerías y chiquilladas de aquellos años juntas, y por hacerme sentir como si el tiempo no hubiera pasado entre nosotras, sabiendo que todas hablábamos el mismo idioma, gracias B. por acompañarme en el coche como siempre y gracias P. por una organización perfecta y llena de ilusión (no sé cuantas veces te doy las gracias al cabo de la semana, pero mi niña, no sé que haría sin ti… ¡¡¡Qué momentos tan estupendos vivo gracias a ti siempre!!! … (Ah!!!! Mañana es martes, y, como todos los martes, B. y yo comemos en tu casa!!!)

Gracias a todas porque me habéis dado la oportunidad de volver a vivir un momento especial en mi vida, y estos momentos son los que hacen que merezca la pena haber vivido, vivir y seguir viviendo la vida con alegría y fuerza.