¿Qué
levante la mano aquel que alguna vez no ha visto a “alguien” venir de frente
por la calle y ha dicho para tus adentros “noooooo, noooooo,
nooooooo… De frente nooooooo!!!! TIE-RRAAAAAAA-Á-BRE-TEEEEEE-Y-TRÁ-GA-MEEEEEEEE!!!”?
Y
además lo has dicho para tus adentros más exteriores, porque la cara de
descomposición terráquea se te va poniendo más acentuada según los metros que
os alejan se van achicando…
(Entrecomillo
el “alguien” porque es un “alguien” conocido y especial por algún motivo)
Y
el problema no es el que viene hacia ti… ¡¡¡Eres tú!!! Que ese día estás
tremebunda!!! (Y lo pongo en femenino, porque soy Mara, una tía… Pero a los
tíos también os pasa colegas!!!)
Hoy
me ha pasado (si mami, me ha pasado y creo que no estás preparada para seguir
leyendo… Deja el post aquí porfa… No sigas, porque si lo terminas, vas a
descolgar el teléfono y vas a ser absolutamente despiadada conmigo… Y no me lo
merezco, porque … bastante mal lo he pasado hoy!!!)
Mi
madre siempre dice que “a una mujer nunca
se la puede pillar en un renuncio”… Lo mío de hoy no ha sido un
renuncio… Ha sido un “qué horror… Dios
mío… Qué desastre!!! Si lo llego a saber, esta mañana en lugar de venir al
VIVERO, me tiro al water… y me tiro a mi misma de la cadena!!!”
De
hecho he pensado que si F50 y AM me hubieran visto esta mañana, con lo ideales
que son ellas y lo peripuestas, sin que lo parezca, que van siempre, me
hubieran arrastrado de los pelos por la calle Álcalá!!!
Y
hablando de pelos… Yo tengo un pelo… Distinto e indefinible…
No
es largo, porque no me puedo hacer coleta, y sobrepasa ligeramente la oreja, y
no es corto, porque no parezco una oveja esquilada o Anne Hataway en “Los
Miserables”…
No
es liso… Y no es rizado… No llevo flequillo, pero no llevo la frente totalmente
despejada… Lo llevo bien cortado y muy despuntado…
Es
un despeinado de peluquería… Es un buen peinado casero…
Lo
dicho, es un corte distinto…, pero muy estudiado para mi agradecido pelo.
Me
suelo lavar el pelo todos los días… Y me queda, con mi super-secador, gracioso
y alocado…
Si
un día no me lo lavo, queda mono pero con bastante menos gracia. Aprobado
raspado.
Si
dos días no me lo lavo, potas. Cate que te cagas!!! Pierde toda la gracia. No
sabes si freir un huevo encima o hacer una tortilla con espinacas… Se me cambia
la expresión de la cara, el abrigo me queda grande, se me hacen carreras en las
medias y la ropa me hace gorda!!! No sé que coño me pasa cuando llevo mal el
pelo…
Pero
hay una cosa clara, el pelo para mi físico lo es casi todo.
Hoy
era el segundo día y … ¡¡¡me he dormido!!! Esta mañana, me he dormido!! Con lo
cual, tras las convulsiones, taquicardias, tacos múltiples, trompicones,
ventosidades incontrolables y un buen “joder-coño-mierda-no-llego”,
me he dado una ducha rápida y semifría, me he vestido “deprisaycorriendo”, me
he tirado un café por encima, he pegado dos gritos que desgañitaban un “niños arriba que nos hemos dormido” y he
salido escopetada por la puerta…
Ni
un rimel. Ni un colorete. Ni un pinta labios (a mi favor he de decir que brillo
si, porque lo llevo en el bolso, pero sólo brillo… y brillo, si no brilla lo
demás, tampoco sirve para brillar mucho). Ni una segunda oleada de colonia. Ni
una cremita de cuerpo. Ni una hidratante de cara. Ni, lo peor de todo con
diferencia, un golpe de peine bajo el caliente chorrazo de mi super-secador…
NADA.
Solamente
dos plas-plas de desodorante, un zas-zas de colonia rápida, y un frus-frus con
los dedos en el pelo mientras he puesto la cabeza hacia abajo… Me he plantado
un pantaca rojo, unas bailarinas negras, y una camiseta (mona lo voy a decir)
negra de manguita larga y cuello barco, pero todo muy soso y muy
“pasa-que-ya-te-vi”… ¡¡¡Una ñorda colega!!! Una pinta de ursulina sucia de
morirte!!! Bufff…. No sé ni pa’que lo cuento…
(“Mama??? Mamiiiiiii? No estás leyendo verdad???” Ha
debido morirse ya… Sigo!)
He
llegado la VIVERO diez minutos tarde (que a mi me han parecido dos horas y
media más o menos) y me he atrincherado en mi invernadero, esperando y rezando
para nadie se acordase de mi presencia y pasasen las horas rápidamente.
De
pronto, una voz terrible al otro lado del teléfono me dice un “Mara baja, que el jefe del VIVERO te quiere presentar a un
nuevo cliente que va a plantar muchas macetas de cactus” … Nuevo
cliente con un nombre y apellido extranjero!!!!!!!! Horrorrrrrrrrrrr!!!!!!!
“YOOOOOOOOOO!!! YOOOOOOOO!!!! YOOOOOOOOOOOOOO PORQUEEEEEEEE
YOOOOOOOOOOOO!!!”
he rebuznado para mis adentros más adentros!!! Odio los cactusssssssss… Mis
jefes del VIVERO lo saben… Echan pocas flores, necesitan de pocos cuidados,
crecen muy lentamente y pinchannnnnnnnnnnn… “MIERDA-CAGAO-CULOOOOOO!!!”
Y bajo…
Bajo
(por el camino me miro en un espejo y como Escarlata O’hara me pellizco las
mejillas para darles colorcillo) y me encuentro, en una de las salas
habilitadas para recibir clientes potenciales del invernadero, a mi jefe del
VIVERO con cuatro maromazos perfectamente uniformados con sus trajes
impecables, sus corbatas estupendas, sus caras recién afeitadas o con unas
barbas maravillosamente recortas, sus gafas de pasta último modelo…
Sus
colonias/perfumes se mezclan entre si… Sus voces son regias y fuertes… Todos a
la par se ponen de pie, haciendo un doble tirabuzón carpado con redoble de
tambor acompañado de flauta travesera en fa sostenido. “No os
mováis por favor!!!” digo en voz alta mientras estrecho manos… “Ni me mireis coño!!!” pienso pa’mi…
“Bueno os presento a Mara, que va a ser vuestra jardinera oficial…” Les sonrío… Pero solamente media
sonrisa, porque me perturba la idea de que, es posible, que en mi huida casera
se me haya olvidado hasta lavarme los dientes… No lo sé…
Noto
que me estoy desmoronando y viniendo abajo… Veo sus bocas moverse, pero su voz
está en OFF… No les oigo… No sé que están contando… Y empiezo a pensar… “Qué horror… Si me ve mi madre me mata… Vaya pedrada… Qué fea
estoy coño!!! Qué horror joder!!!”
Y
me oigo decir “Pues nada… Bienvenidos al VIVERO. Somos los
mejores sin ninguna duda alguna” Mientras pienso “No seré yo, que estoy como para que me den cinco duros por
la calle! O un tortazo si me ve mi madre!!!”
Y
así he estado los veinte minutos de reunión… Deseando salir echando patas, por
no decir, cagando melodías…
Me
he vuelto a mi invernadero… me he semitumbado en mi mesa… he puesto los brazos alrededor de mi
cabeza que miraba el tablero blanco de mi mesa llena de macetas y he dicho en
voz alta “coño, joder, qué mala suerte macho!!!”
y entonces he recordado que hace bastante, por no decir muchos años, me pasó
algo peor… Mucho peorrrrr!!!
3 comentarios:
Lo siento Mara , hoy te tengo que llevar la contraria, la belleza se irradia y seguro que esta mañana lo has hecho a raudales .Del conjunto de la ropa no haré cometarios ...jajaja, casi te los has hecho tu todos .
Un beso ....con la cara lavaá y recien planchá ...
Llego tarde!!! Un poco más tarde que tu.
La verdad es que no te noté nada de nada.
Te vi tan mona como siempre.
Seguro que es una cosa tuya lo de que no venías adecentada,seguro que nadie te dijo...Mara,vienes como un cromo.
Y si ese día no venías tan arreglada como otras veces,que repito,creo que no era el caso,como ha dicho la persona que ha comentado antes,la belleza está ahí.
Buen post.
Un beso.
Tu Catalan Girl te asegura que seguro que ni se dieron cuenta los maromos y que si se dieron cuenta, dales quince días para que te conozcan y se olvidarán de todo... Apuesto lo que quieras que dentro de poco serán carne de "Que la fuerza os acompañe!"...
Besos!
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